Aunque el espresso tradicionalmente se extrae sin filtro de papel, algunos métodos modernos han comenzado a experimentar con su uso para obtener una taza más limpia. Al utilizar un filtro de papel en la extracción del espresso, se pueden lograr algunos beneficios interesantes:
- Filtro de papel en la parte superior: Al colocar el filtro sobre el café molido, entre el tamper y el cabezal del grupo, se ayuda a distribuir el agua de manera más uniforme a lo largo de la pastilla de café, evitando los llamados «canales» (channeling). Esto puede generar una extracción más equilibrada, ya que la presión del agua se dispersa mejor, lo que da lugar a una extracción más uniforme y una taza con menos puntos de sobreextracción o subextracción.
- Filtro de papel en la parte inferior: Colocarlo en el fondo del portafiltro, entre el café molido y la cesta del portafiltro, actúa como una barrera adicional que atrapa los aceites y partículas más finas, lo que da como resultado una taza más limpia, con menos sedimentos en la extracción. Este enfoque es el más común si el objetivo es una bebida más clara y con una textura más ligera.